El nombre del blog ``el seto podao´´ se debe a que como dice Anna Forés en el teatro de la mente y las metaforas educativas los educadores a veces somos como jardineros ya que hacemos que el educando trate de crecer como si fuera una flor o un jardín nuestro papel sería el de jardinero, plantar semillas, arrancar malas hierbas, podar y hacer que nuestra planta de su fruto.
Para empezar queremos comenzar definiendo lo que es la Animación Sociocultural y los modelos que hay.
¿Qué es la Animación sociocultural?
Podemos decir que la ASC nace en Francia en la década de los
60, se caracteriza por ser un movimiento de educación popular, que se enmarca
dentro de la educación permanente.
Su objeto es el de que el individuo sea un agente activo de
su propia formación.
Además la animación sociocultural puede referirse no solo a
temas culturales sino a los sociales que tengan que ver con lo relacionado con
tener una mejor calidad de vida.
Dicho esto podemos encontrar diferentes definiciones de lo
que es la ASC, una de las que más nos acordamos a la hora de definir la educación
sociocultural es la de Trilla quien la define como “El conjunto de acciones realizadas por
individuos, grupos o instituciones sobre una comunidad (o un sector de la
misma) y en el marco de un territorio concreto, con el propósito principal de
promover en sus miembros una actitud de participación activa en el proceso de
su propio desarrollo tanto social como cultural”.
Otros autores como
Caballo la definen como “Proceso
que implica una concepción y orientación del trabajo cultural hacia prácticas y estrategias metodológicas que
promueven decididamente la iniciativa, organización, reflexión crítica,
participación y acción autónoma de las personas, grupos y comunidades en la
vida sociopolítica y cultural en la que están integradas,
independientemente de su condición social, edad, etc. Sus metas se centran en
la promoción social de las
personas en el marco global del territorio, potenciando la democracia cultural,
para alcanzar la emancipación colectiva
y el cambio social”
Pero, ¿Qué es para
nosotros la Animación Sociocultural?
Unos la definen
como el conjunto de prácticas sociales que basadas en una pedagogía
participativa tiene por finalidad actuar en diferentes ámbitos de desarrollo de
la vida, con el fin de promover la participación de la gente en su propio
desarrollo cultural, creando espacios para comunicación con otros individuos.
Otros exponen que la animación sociocultural se caracteriza
por ser un conjunto de acciones llevadas a cabo por individuos y/o grupos de
individuos, independientemente de su condición social, con el fin de formar
personas autónomas con respeto hacia la diversidad cultural para conseguir una
emancipación colectiva y un cambio social y cultural positivo. Esto se daría
como una especie de cadena en la cual los individuos se desarrollan a la vez
que contribuyen al desarrollo de la comunidad y viceversa.
Democracia cultural vs
Democratización cultural.
Por un lado nos
encontramos con la Democracia cultural la cual la definimos como el proceso que sigue la sociedad para
liberarse, donde se promueve la participación y se basa en los intereses y
necesidades de los propios ciudadanos y donde ellos mismos deciden lo que es
mejor para ellos o bien, es la metodología de la
acción liberadora de la sociedad, en la que se promueve la participación,
partiendo de los intereses y necesidades de los propios ciudadanos y donde son
los ciudadanos los que deciden en cada momento que es lo mejor y más
conveniente.
Por otro lado la
Democratización cultural que la definimos como el desarrollo de una
oferta cultural basada en la difusión de los productos culturales dirigido a
dar acceso a la población en general a productos y servicios culturales
elaborados principalmente por la industria del sector.
Podemos decir
que estos dos conceptos tienen diferencias entre ellas como son que:
La democratización es planificada por un individuo
superior mientras que la democracia cultural es planificada por la sociedad en
común.
La democratización cultural concibe a los ciudadanos
como consumidores de una cultura masificada, mientras que la democracia
cultural los considera creadores-productores de una cultura singularizada, e
incide más en los procesos que en el producto en sí.
Pero su vez
tienen semejanzas como que las dos se basan en la acción participativa de la
sociedad en el ámbito cultural.
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